Nutrición 101: verduras

Al pensar en las verduras como parte de su alimentación diaria, cuenta usted con bastantes opciones para crear comidas interesantes y atractivas tanto por su color como su sabor. Aunque las frescas siempre son mejor, la naturaleza de las verduras de temporada suele limitar o incluso impedir el aspecto asequible.  Es importante pues saber cómo formar platos bien balanceados y a la vez pensar en el presupuesto, así como las preferencias del gusto, de la textura y del tiempo. Veamos asimismo consejos que ayuden a incorporar una mayor cantidad de verduras en su dieta diaria y que también satisfagan los paladares exigentes.

Importantes aspectos educativos

Un¿Qué ventajas ofrecen las verduras? Juegan un papel muy importante en el suministro esencial de vitaminas, minerales y otros compuestos a base de plantas que forman un cuerpo saludable.  

  • Contienen diversas vitaminas, minerales, fitoquímicos y antioxidantes que ayudan a proteger el organismo contra la inflamación y a disminuir el riesgo de muchas enfermedades crónicas como las del corazón, el cáncer y la diabetes.  

  • Tienen un buen contenido de fibra que promueve la salud del sistema digestivo, regula las hormonas que estimulan el hambre, así como los niveles de colesterol.

  • Muchas verduras tienen un alto contenido de agua, propicio para la hidratación.

  • Suelen ser bajas en calorías y por ello ayudan a regular el apetito por la sensación de un estómago lleno –come uno menos y se puede manejar mejor el peso corporal. 

    • Prepare las verduras de antemano: lávelas, córtelas, calcule las porciones y almacénelas para tenerlas a la mano durante la semana; fácil y conveniente.

    • Puede comprar verduras ya cortadas o en paquetes de ensalada, o bien, congeladas y listas para poner al vapor; fácil y conveniente. Vea más sobre estos  paquetes de ensalada en nuestro blog Ask the RD (pregúntele a la dietista registrada; en inglés).

  • El blog Ask the RD presenta ideas creativas para añadir a sus comidas verduras de hoja verde en casos cuando falte sabor pero desee mantener una dieta saludable (en inglés).  

Prioridad pues: verduras.  Las ventajas típicas de los bajos niveles calóricos y altos niveles de nutrientes facilitan la selección de las verduras como parte de nuestra alimentación diaria. Sin embargo, desafortunadamente muchos de nosotros fallamos por no comer suficientes cada día.

  • La recomendación de ingesta de verduras es 2-3 porciones diarias.

    • Una porción es 1 taza de verduras frescas o cocidas, o 2 tazas de verduras crudas de hoja verde. 

¡A comer arcoíris!  Además de ingerir más verduras, también conviene procurar su variedad y color para seleccionar las más nutritivas que podamos comprar al mejor precio.

  • Verduras rojas: tomates, rábanos, y betabeles son de alto contenido de vitamina C y licopeno, que pueden disminuir el riesgo de cáncer, así como reforzar la salud cardíaca.

  • Color naranja o amarillo: los chile campana, zanahorias, camotes, y calabacitas son ricas en vitamina C, potasio, vitamina K y beta caroteno para proteger contra infecciones y disminuir el riesgo de cáncer, así como respaldo a la salud de la vista.

  • De hoja verde: verduras crucíferas como la col rizada, espinacas, brócoli, repollo, Bok choy y otras –ricas en vitaminas A, C, K, folato, hierro, magnesio, potasio y calcio, así como antioxidantes que pueden disminuir la inflamación y ayudar a prevenir enfermedades del corazón y cáncer.

  • Azul o púrpura: berenjena, repollo morado, papas moradas y cebolla roja –contienen muchos antioxidantes para proteger las células contra daños y para disminuir los riesgos de enfermedades cardíacas y cáncer.

  • Blancas o cafés: el ajo, la cebolla, jícama, hongos (setas), y las papas son ricas en vitaminas C, K, folato, y potasio además de antioxidantes que pueden ayudar a bajar el nivel de colesterol, mejorar la función inmunitaria, y disminuir el riesgo de afecciones del corazón y de cáncer.

Fomente lo interesante con las recetas y la preparación.  Disfrute las verduras crudas, cocidas mediante métodos saludables de cocción y recetas adaptadas para dichos ingredientes.

  • Las verduras son deliciosas a la parrilla, rostizadas, salteadas, al vapor o blanqueadas. 

  • Muy buenas también crudas por su textura y sabores refrescantes y crujientes.

  • Cuando sea posible, seleccione verduras de temporada frescas, aunque igual, pueden ser congeladas –una excelente alternativa.  

  • Si prefiere verduras enlatadas, asegúrese que sean “sin sal añadida” o “de sodio reducido”.  Enjuague las verduras enlatadas para ayudar a bajar el contenido de sodio.

  • Vea nuestro blog Ask the RD como asesoramiento para escoger frutas y verduras orgánicas en vez de las tradicionales (en inglés).

Propóngase un reto: comer más verduras.  Pruebe la creatividad –seleccione verduras que le gusten y pueda turnar regularmente.  Y pruebe una receta nueva al menos una vez al mes.

  • Entre los consejos sencillos están los siguientes: 

    • Desayuno: incluya con el omelette una variedad colorida de hongos / setas salteados, chile campana o cebolla, o en huevos revueltos tipo frittata del suroeste, o en bocadillos para el apuro mañanero.

    • Añada espinaca o col rizada al licuado de la mañana. Consejo fácil: congélelo en un recipiente seguro para luego “golpear y estrellar” el licuado en trozos y así hacer la verdura menos perceptible y para mejorar la textura del licuado. 

    • Puede usar verduras no frescas que tenga en el refri para hacer una sopa o un sofrito con bastantes verduras.

    • Pruebe rostizando verduras en una bandeja para hornear con aceite de oliva, sal y pimienta –un fácil y sabroso acompañamiento para l comida. Aquí tiene una de esas opciones: cena con bandeja para hornear.

    • Prepare suficientes sándwiches y envueltas con brotes de soya, verduras de hoja verde y tomates.

    • Prepare cenas con una verdura cocida y una guarnición de ensalada para mejorar su ingesta de verduras y hacer más variada la rutina alimenticia. Pruebe una de las excelentes ensaladas o guarniciones de la colección de recetas.

      • Opciones para rematar por arriba la ensalada: tomates, pepinos, apio, o zanahorias.

    • Añada verduras rayadas o picadas a las salsas, cacerolas, sopas, o incluso panes.

      • Ejemplos: calabacita rayada, espinaca picada, verduras mixtas (zanahoria, chícharos, chile campana).

    • Prepare meriendas para la semana llenando un recipiente con verduras frescas que estén listas para sacar y disfrutar. Si opta por mojar las verduras en una salsa (dip) de aderezo, tome en cuenta estos consejos (en inglés) para escoger la opción más saludable. O hay además otras ideas para meriendas en nuestro blog  Ask the RD (pregúntele a la dietista registrada; en inglés).

      • Palitos de zanahoria, apio, chile campana, jícama, o guisantes dulces (chícharos) para mojar en salsa (dip) de humus.

      • Palitos de apio con crema de maní (cacahuatina) o cualquier mantequilla.

Recetas

  • La receta del mes: Cena en bandeja de horno

    • De la cocina de Jamie a la suya, nuestras recetas mensuales se publican en nuestro sitio Internet y en las redes sociales. Le invitamos a navegar ahí la colección de recetas y que vuelva a menudo para descubrir otras ricas recetas; claro, también saludables para el corazón.

Autora colaboradora: Jamie Libera, RD, LD, CCTD, dietista registrada, Providence.

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